• El corredor del Club TYM Running , corrió en Miami su quinto maratón.
• Edgardo nos comparte su Race Report del evento.

En noviembre de 2019 corrí en New York mi 4ta Maratón. Fue una experiencia increíble (ya me había parecido que la gente alentaba en Paris cuando corrí en abril, pero en Nueva York fue impresionante, de otro nivel!). En Nueva York la energía se siente en “todo” momento…. Pero la ansiedad también…  Tanto que me jugó una mala pasada y me costó mucho seguir el plan que habíamos trazado con mi entrenadora Paulina Arias del TYM, con quien entreno desde febrero del año pasado. El plan era terminar debajo de las 3:30 y desde el km 35 empece a sufrir, porque veía que no lo iba a alcanzar y pase por todas las sensaciones en esos momentos…

Así que necesitaba volver a correr y hacerlo pronto, volver a tener la sensación de disfrutar del running, porque con la ansiedad del tiempo no me había permitido tener esa sensación… Y allí surgió Miami.   Conversamos mucho y aceptamos que era una buena opción para volver a correr pronto y disfrutar de una carrera de principio a fin. Entonces, pusimos “manos a la obra”, planificamos maratón y vacaciones familiares con un mismo viaje.

Paulina me adapto el plan para un mínimo descanso, un 30 km más y seguir directo a Miami. Y así fue.  Casi no paré entre el post Maratón de Nueva York, el fin de año y seguimos rumbo a Miami.

La experiencia de Miami fue increíble, aunque acepto que venia con una vara alta de Paris y Nueva York.   

Llegue a Miami el viernes a la mañana y al medio día fuimos con toda la familia a buscar los BIBs de la Miami Marathon y de la Tropical 5K que decidieron correr mis hijos. El retiro de los kits fue en un lindo lugar de Winwood, con una excelente asistencia bilingüe para todo lo que pasaba e iba a pasar, cambio de corral de partida, consejos para estacionar el día de la carrera, muchos regalos y ofertas varias de merchandising.

El sábado temprano, llevamos a nuestros hijos que partieron en buses escolares al lugar de partida de los 5K y los esperamos en la llegada y compartimos la fiesta posterior con toda la onda como si fuera el único evento organizado en el fin de semana.

Y llego del domingo.

Salí temprano en Uber desde el departamento y llegué con tiempo a la largada. La organización del transito fue muy buena teniendo en cuenta la cantidad de gente que iba a correr. Y ya en la calle a las 5:15 se notaba que estábamos en la capital latina de US. Todos los relatos y la música del warm up eran muy latinos, tal como toda la carrera. Desde las 5:45 comenzó la ceremonia de apertura, en ingles y en español, largaron los atletas con discapacidades, los elite y luego los participantes de los corrales A-B-C-D.

El punto negativo de esto, comparativamente con otras experiencias, es que la falta de información en ese momento, donde dejar el bag, como pasar entre las entradas a los corrales y la cantidad / accesibilidad a los baños.

Y 6:05 con mi corral C largamos! (Había tenido que cambiarlo, me habían asignado el G como al azar).

El recorrido es fantástico! Salimos del American Airlines Arena y nos fuimos a South Beach por el puente Mac Arthur Causeway. Ya en Ocean Drive estaba amaneciendo y la gente comenzando a alentar y escucharse la música típica del lugar. Washington Av., una vuelta por detrás del golf pasando por la zona residencial, Dade Blvd y salir de Miami Beach por los puentes de Venetian Way,  las islas y el peaje.  Llegamos a la NE 15 St, N Miami Ave y derecho al Downtown. Allí ya el calor latino de los residentes y turistas se sentía fuerte. Desde el Downtown los del Half que hablamos largado juntos se fueron a la llegada y los 3.135 finalistas de maratón seguimos hacia Brickell, contrastando ahora el cemento con las palmeras anteriores de Miami Beach. Llegamos a Coconut Grove y de allí emprendimos el regreso.   

En cuanto a mi plan de carrera, venia perfecto. En el km 30 le dije adiós al pacer de 3:35 con el que estaba compartiendo la carrera y aceleré para encarar el ultimo tramo. Pase de 5:05 a 4:55, pero me duró solo hasta el km 35. Allí el calor y la humedad tuvo su turno, la temperatura ya había llegado a cerca de los 25°, se hizo sentir y me tiró abajo el ritmo…. Termine el último tramo más cerca de 5:30.

Y volvimos a juntarnos en Biscayne Blvd con los del Half y llegamos al Bayfront Park, donde todo era una auténtica fiesta! Alcance a ver a Jorgelina, mi esposa, que me estaba esperando allí con mis hijos!!!  Una sensación increíble!  Verlos y escucharlos a ellos alentarme, en ese lugar y en ese momento…. Creo que los últimos metros fueron debajo de 4:00.

Fue una carrera para disfrutarla toda, de principio a fin. La hidratación perfecta, con isotónica y agua en cada milla y frutas + geles en 2 partes del recorrido. Vuelvo a decir que el todo el recorrido es fantástico, espectacular, para disfrutarlo todo! Yo corro sin audífonos, pero en varias zonas se escuchaba la música típica de Miami y en otras zonas, uno va escuchando dentro de su cabeza algunos temas que los que tenemos cierta edad dejamos registrado cuando vimos la famosa serie con Don Johnson y Philip Michael Thomas.

Post carrera, después de la medalla y la foto, el agua y la isotónica, bandejas con comida de “almuerzo”, ensalada de frutas, bananas, pretzels, etc…

Y un final increíble…. Ademas de encontrarme para compartir la felicidad con mi familia, una banda latina de la US Army cantando “Vivir Mi Vida” fue lo mejor de todo!!!  No importaron los 42 kilómetros 195 metros que había corrido…. Había que ir a bailar delante del escenario.

Fabuloso… y terminar la fiesta con la hidratación de una cerveza de muy baja graduación alcohólica….   

Así fue mi maratón número 5, con 3:39…. Autentica fiesta del running disfrutada de principio a final, la previa y el descanso post con unos días de vacaciones en la playa en familia.